Nuestra Historia
Nada se construye solo, casi siempre con compromiso y tiempo los sueños se vuelven una realidad.
Las transformaciones son a largo plazo. Lo que comenzó como un simple trabajo dentro del proceso educativo, una herramienta de cambio y compromiso entre compañeros, se fue convirtiendo en una necesidad personal y comunitaria de transformación y solidaridad con los demás.
Esa participación, que fue evolucionando hacia una comunión frente a las necesidades de la sociedad y las comunidades cercanas, permitió que el espacio escolar trascendiera los límites de la escuela. Así, se dio paso a una conciencia crítica que no podía ignorar la realidad social imperante. Ese activismo solidario se fue transformando en un generador de vocaciones profesionales, muchas de ellas vinculadas a lo social, lo educativo y los derechos humanos. Algo que cada miembro de Coy Aike llevó consigo, más allá de los límites del propio grupo.
Nuevos caminos, nuevos desafios
En un comienzo, éramos principalmente egresados, docentes y padres del Grupo de Animadores de Campamento de un Colegio de la localidad de Lomas de Zamora en el Gran Buenos Aires de Argentina.
Decidimos organizarnos fuera del ámbito escolar para asumir la responsabilidad de la participación social que los cambios en la sociedad que aquel 2001 exigían, una tarea que resultaba difícil de abordar desde una institución escolar privada que no asume lo que provoca en su proia comunidad.
A lo largo del tiempo, fuimos sumando personas, hasta conformar hoy un grupo estable de animadores, voluntarios y colaboradores en varios proyectos de promoción social, tanto en Buenos Aires como en Córdoba.
Daniel Sotelo - Socio Fundador
Presidente 2000-2002 y 2010-2014
Testimonios
20 años de historias, de amigos nuevos, de extender la mano, de aprender a trabajar en grupo, por el grupo y para el grupo.
20 años de sueños cumplidos y muchos por cumplir. 20 años de fogones bajo las estrellas más grandes y nítidas que conozco, 20 años de guitarreadas en la piedra, charlas hasta la madrugada, 20, de rio Jaime y mateadas interminables, amanecer en el volcán, tormentas eléctricas y víbora pintada en la piedra. 20 años de reyes, juegos y juguetes. Sólo les pido un favor, mantengan vivo este sentimiento, sepan cuidarlo, conservarlo, disfruten cada día, cada noche, y sepan que detrás de ustedes hay un montón que vivimos y sentimos que Taninga es nuestro lugar en el mundo, ¡¡¡¡felicidades Coy Aike!!!! Sé que serán muchos años más.
Norita Cerisola
PD: Norita se sumo como mamá de Cecilia al grupo y en algunos campamentos, Ceci fue haciendo su camino en los primeros años del 2000 y hoy Norita es socia, cuentacuentos, narradora y un puntal de Coy Aike con la que contamos año tras año en actividades.
